Éramos dioses y nos volvieron esclavos.
Éramos hijos del Sol y nos consolaron con medallas de lata.
Éramos poetas y nos pusieron a recitar oraciones pordioseras.
Éramos felices y nos civilizaron.
Quién refrescará la memoria de la tribu.
Quién revivirá nuestros dioses.
Que la salvaje esperanza sea siempre tuya,
querida alma inamansable.

Gonzalo Arango

Mensajes de la Madre Tierra en territorio muisca

MENSAJES DE LA MADRE TIERRA EN TERRITORIO MUISCA

Ceremonias de pagamento y visita a lugares sagrados por mamos de la Sierra Nevada de Santa Marta para el primer encuentro de saberes ancestrales de Bacatá.